Tanto tiempo sintiendo ese no se que, esa clase de atracción tan rica y tan peligrosa... y ese letrerito mental de "prohibido tocar"...  Ese no verte tan seguido y no necesitarte, y luego el verte y no querer que te fueras...
El conocer a tus novias, y a tus no tan novias... y el ser causante de los celos justificados de cada una de ellas sin haberte tocado un pelo...
El ser parte de tu vida, todas las noches que dormimos juntos, y amanecimos abrazados sin que sucediera nada...
Las miradas silenciosas, esas que nos decían tantas cosas... los abrazos cariñosos, y todas las oportunidades que tuvimos para volvernos locos y no lo hicimos...
El respeto inmaculado, ese "no se puede" que nos hizo posponer los instintos...
El nunca hablar del tema y sin embargo estar tan claros... Ese "mejor no", que nos hizo darle largas al asunto...
Ese querernos tanto, ese no querer dañarnos... ese amor tan de verdad, tan de hermanos, tan independiente de las ganas de la piel...
La fastidiosa moral... el buscar excusas y el hacernos los locos...
La noche,  tus manos y tus besos en las mías, la oscuridad, tu mirada intimidante, nuestra cercanía incomoda...
Mi corazón acelerado, tu olor, mi ansiedad, la ausencia de palabras y la verdad inminente de que no podíamos hacer otra cosa que besarnos...
Los mejores besos que me han dado, y esa ternura tan tuya... los abrazos,  nuestra lucha para no pasar la línea... la sensatez versus la tentación... el no poder más y el detenernos.
Dos días de besos escondidos, el miedo a ser descubiertos, y una despedida tan social, tan monótona... Esa que hemos tenido siempre pero que ahora incomoda...
Los mensajes, las conversaciones risueñas... el no se que va a pasar mañana, contra el querer perder la cabeza...
Ese te quiero ver, y luego tu silencio...
Ese que para mi tiene tanto sentido, el conocerte tanto para interpretar tu lejanía... La seguridad de que volverá a pasar, pero el no saber cuando...
El saber que no lo olvidas, y luchas contra eso como yo...
Besos, tan solo besos, esos que nos hicieron olvidarnos de todo, los que tanto evitamos...  y los que ahora extraño...
El comienzo de nuestra antigua lucha, ese no querer enredarnos la vida, y el tratar de volver a ser lo que eramos antes... sin esos besos...
Esa distancia, esa que intentas mantener pero que seguro en algún momento vamos a perder...
La ausencia de mi miedo, y el querer que tu también lo pierdas...
La razón diciéndome que aproveche la tregua y me escape... que estamos a tiempo.
Esta tentación que somos los dos, mi paciencia rehabilitada y esa incertidumbre a flor de piel...
Mi pensamiento nervioso de no saber si era mejor desertar de la tentación o vivir este sentimiento descarado de no arrepentirme, aunque eso nos lleve a esta lejanía absurda...
Y ese presentimiento de que es el principio de algo que no se definir...
Pero que parece ser imposible